Dado que éste día fueron dañados por un grupo de alumnos los edificios de Rectoría y administrativo. La Universidad Autónoma del Estado de México por medio de un pronunciamiento informa que harán las denuncias pertinentes para fincar responsabilidades que la autoridad judicial determine.
La Universidad ha sido nuevamente violentada por un grupo minoritario de la comunidad estudiantil que, sin representar los intereses legítimos del movimiento feminista o la lucha por la equidad, ha roto con la vocación y el espíritu de nuestra comunidad.
Negamos su representatividad porque sus acciones son contrarias al espíritu y el carácter universitario, porque los universitarios nos reconocemos en nuestra misión social, en nuestra deuda y función comunitaria.
Se ha mantenido un respeto estricto de la autonomía y facultades de libre autodeterminación de cada comunidad. Hemos confiado en la inteligencia y solidez moral de los inconformes, pese a la continua campaña de criminalización en contra de nuestra propia Casa. Reconociendo el impulso de la juventud y poniendo en el centro de nuestros programas de trabajo sus demandas, la Universidad ha confiado en la organización estudiantil que hoy simplemente ha dado la espalda a sus comunidades y se ha lanzado en contra de los trabajadores y trabajadoras, en la más irracional de las provocaciones.
Con sus acciones pretenden hacer de la Universidad su enemigo, pese a las muestras manifiestas de apoyo a la causa que las ha impulsado. Por ello no nos queda más salida que hacer las denuncias pertinentes y fincar las responsabilidades que la autoridad judicial determine, y lo hacemos así, con profundo dolor, pero atendiendo a la justa demanda de una mayoría de universitarias y universitarios afectados y que hoy han visto la intransigencia de grupos fanatizados, cuyos intereses han derivado en búsquedas políticas de poder que desvirtúan la lucha de las mujeres.